Un hombre humilde estaba perdidamente enamorado de la hija de un hombre rico, estaba tan enamorado que le pidió su mano.
Sin embargo, la chica lo rechazó diciendo: “tu salario mensual es equivalente a lo que gasto en un día, cómo quieres que me case con alguien como tú? Yo nunca te podría amar, así que mejor consigue una chica de tu nivel”. Él se sintió muy mal y lo superó. 10 años después se volvieron a encontrar en un centro comercial.
Ella lo reconoció inmediatamente y dijo:
“Hola! Cómo estas? Imagínate que me casé con un hombre muy inteligente que gana 17 mil dólares al mes. Puedes superar eso?”
El hombre se veía muy disgustado y antes de que pudiera decir algo, se acercó el esposo de la chica y lo saludó: “Buenas tardes señor, veo que ha conocido a mi esposa”.
El hombre respondió “Buenas tardes, señor…”— “Carter, señor” respondió el esposo. Luego se volteó hacia su esposa y le dijo “Querida, quisiera que conocieras a mi jefe, él es dueño de la compañía de 100 millones de dólares para la que trabajo”
El hombre que había sido rechazado hace 10 años, sonrió y dijo: “debo irme, me alegró mucho verlos y les deseo lo mejor”.
La mujer no lo podía creer y le dijo a su esposo: “ESE ES TU JEFE?” y el esposo respondió:
“Él es un hombre maravilloso, alguna vez me contó que el amor de su vida lo había rechazado porque no tenía dinero, así que trabajó muy duro hasta convertirse en un multimillonario. Sin embargo, nunca lo pudo superar y aún no tiene esposa. Te imaginas si esa mujer no lo hubiera rechazado?”
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